31. Mural del palacio de congresos de Madrid, 1980 - Joan Miró (1893-1983) - Surrealismo abstracto

Miró después de experimentar con el postimpresionismo, cubismo y el fauvismo, viaja a París donde conoce a Picasso y el incipiente grupo surrealista de 1920, pero pasando gran penuria expone sin éxito. Buscando un estilo propio culmina un periodo detallista con su obra La Masía y empieza un nuevo estilo pintando solo los detalles del modelo en forma de signos, en obras como Tierra labrada o el Carnaval del arlequín ya con motivos totalmente surrealistas. Estas obras son expuestas en una segunda exposición en París en 1925 y en otra colectiva con otros surrealistas como Giorgio de Chirico, Max Ernx o Man Ray, con gran exito, colaborando con ellos hasta que el grupo se disuelve. Su estilo cada vez más abstracto e ingenuo, lo incorpora a grandes esculturas y murales cerámicos. A partir de 1940 Joan Miró y Josep Ll. Artigas, un ceramista amigo del artista, colaboran en multiples murales como los murales de Sol y la Luna de la Unesco de 1955, buscando soluciones estéticas con el uso de los esmaltes y los azares en las cocción de las piezas
La masía, 1922 Carnaval del arlequín, 1924
Murales del Sol y la Luna en la Unesco, 1955